domingo, 24 de mayo de 2009

sábado, 23 de mayo de 2009

En la salud, en la enfermedad, y a pesar del cambio de sexo.














Antes y ahora: Fran y Denise Brunner tuvieron hijos cuando Denise, al centro a la derecha, era Donald.

Hay formas en las que los Brunners son como muchas otras parejas de edad madura casadas. Antiguos novios en la prepa y en la universidad, sabían lo que el otro estaba a punto de decir y ordenaban la misma comida en los restaurantes. Ellos llevaban a sus tres hijos a entrenamientos deportivos, y se reían cuando su perro labrador brincaba al sofá a lamer a los invitados.
"Somos de las pocas parejas entre nuestros amigos que aún continúan en su matrimonio original", dice Denise Brunner. Pero no es exactamente la misma unión, como lo evidencía su certificado de matrimonio, el cual han mandado ampliar a tamaño póster para dar a entender su punto. El original, de 1980, nombra a Donald Brunner como el contrayente y Frances Gottschalk como la contrayente. Pero una operación de cambio de sexo en el 2005 cambió a Donald en Denise. Fran se mantuvo al lado de su cónyugue, y la pareja consiguió un certificado de bodas corregido, donde dice "Denise" junto al nombre del contrayente masculino, por no tener otra opción

Massachussets es el único estado en Estados Unidos en donde el matrimonio entre personas del mismo sexo es legal, y los Brunners son dos mujeres casadas entre sí en Nueva Jersey. Como este estado (junto con Connecticut, Vermont y New Hampshire) enfrenta controversias sobre si sus uniones civiles cumplen con el mandato de proveer a las parejas del mismo sexo de derechos y beneficios equivalentes, los Brunners se ofrecen como ejemplo de cómo el intrigante complejo de leyes matrimoniales de su país, que incluye las sociedades domésticas de California y otros estados, puede estar fuera de tono con la vida de la gente.

Los Brunners dicen que no están interesados en obtener una unión civil - la consideran una disminución del grado de su relación - pero sí les preocupa su estatus. ¿Qué sucedería sin el Servicio de Recolección de Impuestos questiona sus declaraciones de impuestos en común? ¿Qué pasaría si deciden retirarse a Carolina del Norte, un estado que dicen es menos amigable legalmente a los transexuales y a las parejas del mismo sexo?. ¿Qué pasaría si mientras llevan a su hija Jessica a la universidad en Pennsylvania, y tuvieran un accidente automotriz que dejara a Denise inconsciente - aceptarían las autoridades a Fran como su esposa?. "¿Van a reconocerla como familiar para que pueda tomar decisiones médicas por mí? Pregunta Denise. No lo sabemos, y no sería el momento adecuado para apelar eso en una corte."

Nadie lleva la cuenta del número de gente transgénero en los Estados Unidos, ya no digamos el número que permanecen casadas después de un cambio de sexo, dice Mara Keisling, directora ejecutiva del Centro Nacional para la Equidad Transgénero en Washington.
Julie A. Greenberg, profesora en la Escuela de Derecho Thomas Jefferson en San Diego, dijo que los matrimonios como los de los Brunner rara vez son apelados por las agencias gubernamentales porque los estados más conservadores no reconocen los cambios de sexo, y los más liberales (como Nueva Jersey) no quieren parecer hostiles a los transexuales.
Los Brunners ya estaban casados cuando Donald se convirtió en Denise. Los transexuales que se casan después de la cirugía plantean un conjunto diferente de problema, y existe un número de casos legales con decisiones sobre todo el mapa legal.

Apremiando a la Corte Suprema de los Estados Unidos a que abordara este tema en el año 2000, abogados de Christie Lee Littleton, un transexual hombre-a-mujer que demandó a los doctores de su esposo por muerte culposa, nota el panorama confuso: "Llevando esta situación a su conclusión lógica, la Sra. Littleton, mientras está en San Antonio, Texas, es un hombre y tiene un matrimonio nulo, si viaja al norte a Vermont, ella es hombre y puede casarse sólo con una mujer; si en vez de eso viaja al sur a Nueva Jersey, puede preferir casarse con un hombre."
La Corte Suprema declinó considerar el caso.
La referencia de Nueva Jersey proviene de un caso de 1976 en el cual una corte de apelaciones dictaminó que un hombre debía pagar pensión a su ex-esposa, que había nacido como hombre, esencialmente diciendo que el sexo se determina por su estatus actual, y no por el DNA. Pero un caso del 2004 en Florida tomó el camino opuesto: un transexual mujer-a-hombre que se casó con una mujer y después se divorció, perdió la custodia de sus hijos, porque el matrimonio se declaró inválido porque ambos eran del mismo sexo.

Artículo traducido de:
http://www.nytimes.com/2008/04/27/fashion/27trans.html

Y ustedes, mis amigos y amigas lectores: ¿se mantendrían casados con el amor de su vida, aún si éste (o ésta) decidiera cambiar de sexo?

jueves, 21 de mayo de 2009

Control del orgasmo masculino. Parte 1: Orgasmo y pregasmo.

Esta sección te ayudará a evitar el orgasmo durante el sexo, ¿Por qué querrías algo así? Para que el sexo dure más tiempo. Una vez que tienes un orgasmo, el sexo a veces puede continuar, pero usualmente el orgasmo significa la pérdida de la erección y el final del sexo. La mayoría de los ejercicios aquí involucran practicar primero por tu cuenta durante la masturbación. Aprenderás rápidamente de esta manera. Puedes aprender el control del orgasmo practicando durante el sexo, pero la práctica en solitario te hará avanzar más rápido. Cuando llegues al sexo, estarás más que listo.

Pre-gasmo: la señal antes del orgasmo
En algún momento durante el sexo, alcanzarás un punto en el cual sientes que el orgasmo está a punto de suceder. Si te mantienes haciendo lo que hacías y tienes el orgasmo, lo más probable es que sea el final del sexo. La manera más sencilla de evitar el orgasmo y mantener el sexo es detener el movimiento de mete-saca del pene. No lo lleves hasta el límite. Habrá una fuerte urgencia natural para seguirte moviendo. No lo hagas. Si quieres que el sexo continúe, detente. Después de unos momentos de descanso, puedes comenzar otra vez. La sensación que tienes justo antes del orgasmo es lo que llamo tu pre-gasmo. Es una señal, una alarma, que te dice que tu orgasmo está a punto de suceder pero no ha sucedido todavía. Existe una pequeña ventana de tiempo entre el pre-gasmo y el orgasmo en la cual puedes decidir detenerte. El pre-gasmo es tu última oportunidad. Tienes menos de 2 a 3 segundos para decidirte. Después del orgasmo no hay vuelta atrás. Tomas la pastilla azul, te sigues moviendo, tienes un orgasmo y la historia se termina, despiertas en tu cama. Tomas la pastilla roja, te dejas de mover tan pronto como llegas a tu pre-gasmo, no llegas al límite del orgasmo, y te mostraré como funciona el sexo profundo.

Ejercicio 1: Detente durante la masturbación.
Comienza masturbándote como siempre. Cuando te aproximes al orgasmo, deja de masturbarte. No lo lleves al límite. Deja que la tensión se disuelva. Cuando te hayas relajado lo suficiente, mastúrbate otra vez hasta que sientas que el orgasmo está a punto de llegar otra vez, entonces deténte. Repite esto por el tiempo que quieras.

Esta es la manera más sencilla de mantener el sexo. Más adelante aprenderás como mantener el sexo sin detenerte de esta forma. Primero, debes aprender a reconocer el pre-gasmo, y a detenerte inmediatamente. De otra manera, el sexo se termina. Sin el pre-gasmo, el control del orgasmo masculino se desbarata. Practica primero por tu cuenta. Aprenderás más rápido de esa manera. Tu concentración no se disipará por distracciones externas. Una vez que hayas practicado el detenerte en el pre-gasmo por tu cuenta, inténtalo durante el sexo:

Ejercicio 2: Detente durante el sexo.
Comienza despacio durante el sexo. Cuando te acerques al orgasmo, cuando tengas tu pre-gasmo, sólo detente. Si estás arriba, deja de moverte del todo. Si estás debajo, pide a tu pareja que deje de moverse. Si estás muy cerca, puede ser necesario que retires tu pene. Relájate completamente y deja que la tensión disminuya. No llegues al límite del orgasmo. Si sientes que parar el flujo del sexo se siente raro, llena el espacio con besos y caricias. Cuando comiences otra vez, hazlo despacio. Practica esto tanto como quieras.

Ahora, cuando estés contento con detenerte, podemos continuar con mantener el sexo sin tener que detenerte. De todas formas, siempre estate al pendiente de tu pre-gasmo. Siempre puedes recurir a detenerte como último recurso cuando las cosas no funcionen. Desde este punto en adelante debes de intentar nunca tener un orgasmo "por error". Si todas las otras técnicas fallan, por lo menos, el detenerte te mantendrá en el camino.

Cómo durar más tiempo: Control del orgasmo masculino

Esta serie de entradas está diseñada para darte una cosa: sexo por tanto tiempo como quieras. Si alguna vez has tenido una eyaculación prematura, o si quieres que el sexo dure más tiempo, has venido al lugar correcto. Lo que sigue es una serie de técnicas que te dan control sobre cuando tienes tu orgasmo. La idea central en el control del orgasmo masculino es mantenerse totalmente alejado del orgasmo, pero aún mantener una erección sólida. Esto te permite tener sexo por tanto tiempo como quieras. Por simplicidad, en este texto cuando hablo de "tú" me refiero al compañero masculino.

A continuación veremos:

Parte 1: Detente en el pregasmo: La señal justo antes del orgasmo
Parte 2: Nueva técnica: Relaja tu músculo PC para retardar el orgasmo
Parte 3: Respiración lenta: Haz que tu cuerpo vaya más lento
Parte 4: Enfoque en el Ajna: Sexo tántrico
Parte 5: Tips para el control del orgasmo: Posiciones, confianza, sexo sin orgasmo

martes, 19 de mayo de 2009

¿Cómo puede afectar el sobrepeso a las relaciones sexuales?

Mi sexóloga favorita Alessandra Rampolla, durante una charla con la prensa bonaerense reveló que se sometió a una cirugía bariátrica, intervención que le permitió perder 35 kilos. "Por cuestiones de salud y de mi bienestar decidí que era importante bajar de peso. Algún día quiero ser mamá y con el peso que tenía, estar embarazada no hubiera sido una decisión saludable?”
“Por eso, mi marido y yo comenzamos a pensar a futuro y determinamos que, para mí, la respuesta y el camino adecuado era someterme a esta cirugía (...)", confesó Rampolla.

Les recomiendo el siguiente video sobre la entrevista que le hicieron a Alessandra, en la que responde a preguntas como: ¿Cómo puede afectar el sobrepeso a las relaciones sexuales?



Siempre he pensado que esta mujer es bellísima con todo y sus kilos de más, a lo cual se añade su gran carisma y personalidad burbujeante, pero bueno, creo que con la pérdida de peso se ve todavía mejor. Les recomiendo ampliamente su programa de televisión "Alessandra a tu manera", que es mi programa favorito y lo pasan en el canal Fox, aunque también tiene otros programas similares. Lo que más me gusta de ella, aparte de sus amplios conocimientos en materia de sexualidad, es la forma tan informal y tan clara que tiene para hablar y para decir las cosas como son; sin perder jamás el sentido del humor, y con esa sonrisa tan sincera y constante. ¿Se nota que soy fan?

lunes, 18 de mayo de 2009

Manifiesto Sexual



En cuanto a mi vida sexual, existe una regla importante: Sólo tener buen sexo. Quiero decir, sí, puede ser asombroso, fabuloso, apabullante, etc... pero como mínimo, debe ser bueno. Bueno significa que me haga feliz, que esté satisfecha, que me divierta. No estar pensando en las cosas del súper que hacen falta, o en qué voy a cocinar al día siguiente, o en qué color tan aburrido tiene el techo. Buen sexo significa disfrutable, que me gustaría tener otra vez y del cual no intentaría escapar al menor pretexto. He decidido que sólo voy a tener buen sexo de ahora en adelante (hace unos seis meses tuve sexo realmente malo, con un tipo que venía de mi pasado y a quien no quiero recordar... pero es algo que no me vuelve a suceder, lo juro).

¿Cómo le hago para tener sólo buen sexo?

Si tuviera que ofrecer a la gente un manifiesto sexual, tendría cuatro mandamientos para comenzar. Síguelos, y tendrás buen sexo.

1er. Mandamiento: Tendréis sexo preferentemente sólo con parejas que os atraigan físicamente y por quienes sentís un notable deseo sexual. No hay mejor afrodisíaco que estar con una persona que realmente te alborota las hormonas. No tengáis sexo si no sentís ganas de ello.

2do. Mandamiento: La comunicación es clave. Os comunicaréis, con ti mismo y con tus parejas.
Si no puedes hablar libremente con la persona con la que estás teniendo sexo, ¿por qué demonios estás teniendo sexo con esa persona? No hay nada de malo con hablar antes, durante y después del sexo. Si algo se siente bien, dilo. Si algo no se siente bien, dí qué es lo que sí te hace sentir bien. Si no sabes lo que quieres o necesitas, ¿cómo carambas puede alguien más dártelo? Si necesitas X, Y y Z para que el sexo sea satisfactorio para tí, entonces pide X, Y y Z. Parece fácil, pero todos nos consideramos buenos comunicadores, y la mayoría lo somos, sobre cosas que no involucren sexo. Comunicáos, y llegaréis lejos.

3er. Mandamiento: La risa es el manjar de los dioses, o algo así. Vosotros os reiréis, sobre vosotros y sobre las situaciones sobre las que os encontréis.
El sexo es ridículo. De verdad. Tan caliente y molesto como puedas ponerte mirando pornografía, tómate un momento para observar a otra gente teniendo sexo. Es tonto, es chistoso, hay ruidos extraños, algunas veces nos caemos de la cama, algunas veces los gatos brincan a la cama, etc. El sexo no tiene que ser profundo y serio - puede ser divertido y lleno de risas. Si no puedes reírte con la persona que está teniendo sexo contigo, ¿cómo puedes dejarlo que haga otras cosas contigo?
Reíd, y seréis recompensado.

4to. Mandamiento: El lubricante es amor. Usaréis lubricante, mucho lubricante. Y entonces, probablemente, añadiréis un poco más.
Mucha gente piensa que esto es un chiste. ¿Qué tiene que ver el lubricante con sexo asombroso? Para mucha gente, la respuesta es: todo. Para gente que usa una variedad de medicinas, tienen problemas lubricando naturalmente. Otras simplemente no lubrican mucho. Algunas mujeres se empapan en lubricación natural, pero si tienes la suerte de cogerlas por una hora, o dos, o tres, en algún momento, su propia lubricación (justo como la lubricación artificial) se va a secar. Los anos no tienen lubricación alguna. Básicamente, casi no existe ninguna situación en la que un poco de lubricante extra (o mucho extra) puede contribuir a un mejor sexo. Más húmedo es mejor. Y si llegaras a tener demasiado (hipotéticamente hablando), siempre puedes limpiar el sobrante.
Usad lubricante, y estaréis resbalosa y satisfecha.

Por supuesto, no está de más recordarles que practiquen el sexo seguro, o sexo protegido. No queremos un embarazo no deseado o alguna enfermedad de transmición sexual. Seguid estas sugerencias, y el buen sexo seguro estará en vuestros horizontes. A mí me ha funcionado.

Adaptado de:
http://essin-em.com/sexual-manifesto/

domingo, 17 de mayo de 2009

Hablar con los niños sobre sexo y sida: ¿A qué edad es recomendable comenzar?


¿Cuál es la edad adecuada para tener "la plática", no sólo sobre de dónde vienen los niños, sino también sobre sexo y el SIDA? Un documental, titulado "Please Talk to Kids About AIDS" (Por favor hablen con los niños sobre el SIDA) pone en la mesa esta pregunta de una manera enternecedora pero inquietante. El documental (de unos 15 min) puede conseguirse en:


En éste, dos niñas pequeñas, dulces y precoces, Vineta y Sevilla Hennessey, de edades 6 y 4, acompañan a su padres, los productores del film, a la Conferencia Internacional sobre SIDA 2006 en Toronto, Canadá. Ellas entrevistan a líderes expertos en SIDA, activistas gay, distribuidores de condones, una vendedora de juguetes sexuales, un transvesti disfrazado de la reina Elizabeth II y un hijra indio transsexual vestida de sari.

El aspecto inquietante del film, es que, mientras una pregunta infantil conduce a la siguiente, preguntan cosas como: "¿cómo es que el sida entra a tu cuerpo?", y "¿cómo es que quieren tener sexo?". Para un reportero, constituye un placer culposo el ver a algunos de los mejores científicos de clase mundial retorcerse -o no- cuando son acorralados por una niña.

El Dr. Anthony S. Fauci, una de las más reconocidas autoridades en cualquier asunto relacionado con virus, parece tan relajado como cuando está en la televisión o ante el Congreso. "Ya saben", dice, "cuando un hombre y una mujer tienen relaciones sexuales pueden infectarse. Y también cuando se inyectan con una jeringa que esté contaminada con el virus". Pero, igual ante las niñas que ante los senadores, el Dr. Fauci se desvía casualmente de las preguntas que seguirían, adelantándose con "¿Saben lo que es un virus"?.

En contraste, el Dr. Mark A. Wainberg, el copresidente de la conferencia, se deshacía en risa nerviosa: "Bueno, el SIDA entra en tu cuerpo de maneras que - pueden ser complicadas de explicar a niñas pequeñas", dice, continuando con "De la misma forma en que una mami y un papi tienen una relación que... resulta en que vengamos al mundo. Pero, sabes qué, preguntaste una gran pregunta. Sólo que no estoy seguro de estar preparado para responderla."

Las niñas obtienen respuestas directas sobre la unión de los cuerpos, de Craig McClure, el director de la sociedad para el SIDA, y sobre intercambiar sexo por dinero, de una activista por los derechos de la prostitución.

Pero el documental está lejos de ser una conferencia médica. Las actividades teatrales en los pasillos - banderas, marionetas, danzantes - le dan a la conferencia un aire de festival. De hecho, una parada no planeada en la mesa del Proyecto Condón, inspiró a los productores, Brian Hennessey y Radia Daoussi, a centrar el film en sus niñas. Sevilla pensó que los paquetes brillantes eran dulces y le encantó el vestido de Cenicienta y los tutús hechos de condones azules y rosas. Preguntó sobre ellos, y la dificultad por la que pasó un voluntario para transformar su elaborado discurso en palabras más sencillas que "desestigmatizar" dejó ver claro que la inocencia de un niño provocaría buenas entrevistas. Pero la inocencia - que es fugaz - se escapó. En un momento, Vineta enseña a la cámara un dibujo de dos personas en la cama. "Estos son condones", explica sobre el bol detrás de ellos, "que se ponen en el pene de un chico, para que no tengan SIDA con una mujer o con un hombre. Un hombre puede hacerlo con un hombre si lo quiere".

Lo que es curioso, sólo algunos entrevistados buscaron asegurarse de que el productor y el camarógrafo eran Papá y Mamá, cuyo consentimiento debiera ser crucial antes de responder las preguntas a las niñas. La mujer en el puesto de trabajo sexual lo preguntó, mientras les daba estolas de plumas a las niñas para que se imaginaran una noche en la calle. "Me estaba preguntando para qué traían a niños aquí", le dijo al señor Hennessey.

El pobre Dr. Wainberg dijo que estaba abrumado organizando la conferencia y que no le habían dicho nada sobre las niñas antes de que se las presentaran. "Estaba un poco consternado", dijo después en una entrevista telefónica. "No estaba seguro de que fuera el lugar y momento para entrar a una larga explicación sobre las abejas y los pájaros". El Dr. Fauci dijo que había sido prevenido por un asistente de prensa, y guió sus respuestas por las reacciones de las niñas.

Las niñas parecían en control de sí mismas y cómodas en la presencia de los adultos. Al preguntarle un miembro del público si tenía algún consejo, Vineeta dijo: "Sí, no compartan muchas cosas. Es como lo que dicen en mi casa", explicó. "No compartas un cepillo o un sombrero porque te puedes contagiar de piojos". Según la señora Daoussi, no hay una edad correcta para abordar el tema. "Es cuando los niños están listos para preguntar", dice. "Es nuestra propia incomodidad con el tema, no la de ellos. Los niños no tienen tabús".

Pero el documental no está dirigido a niños, ciertamente no en la forma en la que se encuentra actualmente, según dicen sus productores. Sin embargo, esto nos orilla a preguntarnos como tratar el tema con nuestros propios niños.

Ahora soy yo, Tamara. No tengo hijos ni hijas a los cuales tenga que explicarles este tipo de temas, pero el artículo me pareció muy interesante. Muchos de los prejuicios con los que cargamos hasta llegar a la vida adulta provienen de la niñez, no sólo de las cosas que nos dicen en la casa y en la escuela, sino también de lo que NO nos dicen. Estoy de acuerdo con Daoussi, la edad correcta para hablar de cualquier tema es cuando los niños están listos para preguntar, o cuando se presente la oportunidad de hablar de ello, cuidando que las respuestas estén al nivel de lo que los niños pueden entender.